Tónico facial casero de manzanilla y rosas: receta paso a paso

Los productos naturales para el cuidado de la piel siempre han estado en la vanguardia de los regímenes de belleza gracias a sus beneficios inigualables y su mínima exposición a productos químicos.

En el post anterior, discutimos en detalle qué es y para qué sirve el tónico facial, además de cómo utilizarlo correctamente.

Si la idea de preparar tu propio tónico facial te intriga y deseas experimentar con ingredientes naturales, tenemos la receta perfecta para ti: un tónico facial casero de manzanilla y rosas. Esta refrescante mezcla no sólo cuidará tu piel, sino que también llenará tus sentidos con su suave y calmante aroma.

Te sorprenderá lo fácil que es de preparar este tónico y lo beneficiosa que será para tu piel. Veamos, paso a paso, cómo se hace.

¿Cómo hacer un tónico facial casero?

Para hacer esta receta de tónico facial de 500gr necesitarás:

Fase acuosa

• Agua destilada 260gr
• Agua de rosas 100gr
• Hidrolato de manzanilla 75gr
• Extracto hidroglicerinado de aloe vera 25
• Extracto hidroglicerinado de caléndula 25
• Glicerina 10

Fase tercera

• Aceite esencial manzanilla 2,5gr
• Conservante COSGARD 2,5gr

¿Cómo funcionan estos ingredientes?

En el mundo de la belleza y el cuidado de la piel, las rosas y la manzanilla son bien conocidas por sus propiedades curativas y calmantes. Además, los extractos de aloe vera y caléndula agregan un toque extra de hidratación y beneficios antiinflamatorios, mientras que la glicerina vegetal actúa como humectante, protegiendo la piel y previniendo de la sequedad.

Elaboración

Ahora que conoces todos los ingredientes que forman parte de esta receta, veamos como hacer este tónico facial casero paso a paso:

1. Comienza por pesar cada una de las fases (acuosa y tercera) por separado. Es esencial mantener precisión en las medidas para garantizar la eficacia del tónico.

2. Una vez pesados los ingredientes, mezcla cuidadosamente todos los componentes de la fase acuosa. Asegúrate de revolver hasta obtener una solución homogénea.

3. Luego, procede a incorporar la fase tercera a la mezcla. Al hacerlo, ve añadiendo poco a poco y removiendo suavemente para asegurar una correcta integración de todos los componentes.

4. El siguiente paso es medir el pH de la mezcla. Este debería estar entre 5,5 y 6,5 para garantizar un tónico suave y adecuado para la piel. Si el pH es demasiado alto, puedes bajarlo añadiendo ácido láctico. Si, por el contrario, el pH es demasiado bajo, puedes subirlo agregando bicarbonato de sodio. Recuerda añadir estos ajustadores de pH en pequeñas cantidades, midiendo nuevamente después de cada adición para evitar alteraciones drásticas.

El seguir estos pasos de manera precisa y cuidadosa te permitirá obtener un tónico facial casero de alta calidad que proporcionará un cuidado excepcional para tu piel.

Una vez que hayas terminado de preparar tu tónico facial casero, te invitamos a compartir tu experiencia. Nos encantaría escuchar tus comentarios. ¡Anímate a compartirlos en la sección de comentarios a continuación!

Recuerda que la belleza es un camino compartido, y todos podemos aprender de las experiencias de los demás.